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Cuando La Cornue lanza un nuevo horno, el mundo culinario está de enhorabuena. 107 años después de la invención del horno de bóveda, La Cornue agita de nuevo la escena gastronómica mundial gracias a una patente innovadora relativa a un sistema revolucionario del horno de gas. Con su modesta denominación, Château G4, igual que la cuarta generación de hornos de bóveda La Cornue, este dispositivo reúne todos los modos posibles de cocción en un horno de gas: radiación, convección y conducción.
El horno de gas y su invento patentado: el disco RCC
En el horno G4, la tradicional rampa de gas se han sustituido por un conjunto totalmente inédito: un quemador circular de gran potencia, especialmente ecológico en su consumo energético, se coloca en el interior de una solera abierta. A este dispositivo se suma un disco de forja esmaltada con grafito laminar. Difusor de calor, a la vez que su guardián, este disco favorece una distribución muy regular del aire caliente por el horno de tres maneras diferentes. Primero por conducción cuando, por ejemplo, una olla se coloca a fuego lento directamente sobre el disco; en segundo lugar, por convección natural, con una discreta circulación ventilada del aire caliente; y, por último, por radiación que se refleja sobre las paredes interiores.
Ningún otro horno de gas posee tantos modos de cocción, lo que brinda la posibilidad de cocinar a fuego lento a baja temperatura o dorar los alimentos bajo un grill eléctrico con zonas combinables. Se han necesitado tres años de investigación y desarrollo para crear y fabricar este horno. Incluso se ha depositado una patente para el invento de este dispositivo exclusivo, denominado disco RCC.
El nuevo horno eléctrico G4 también ha sido objeto de numerosas mejoras, para brindar al cocinero la posibilidad de elegir entre cuatro modos de cocción: modo de calor forzado, modo grill, modo solera o modo combinado solera y bóveda.
El conjunto de estas mejoras e invenciones reunidas en un solo horno propulsa el Château G4 a la cumbre de la tecnología culinaria.
El horno de bóveda La Cornue, invención centenaria
Es importante recordar que el horno de bóveda permite, por su forma, que el aire circule de manera natural y homogénea, evitando que los alimentos se resequen y garantizando una restitución óptima del sabor de los platos. A fin de mantener una higrometría óptima, el sellado del horno se realiza gracias a una nueva puerta con revestimiento interior de vitrocerámica, con lo que se ofrece asimismo una seguridad total por la baja temperatura que se percibe al contacto desde el exterior. Otra ventaja, las aberturas en la puerta del horno ya no suponen una pérdida significativa de la temperatura.
Diseño ecológico
El conjunto de las soluciones tecnológicas aportadas a los nuevos hornos de gas y eléctricos incrementan su eficacia todavía más. El ascenso de la temperatura es muy rápido, pues los 200 °C se alcanzan en 8 minutos escasos, en el caso del horno de gas, y en 13 minutos, en el caso del horno eléctrico (modo de calor forzado). El control de la temperatura es de una precisión excepcional y puede ajustarse hasta los 275 °C. Extremadamente económico en consumo energético, los nuevos hornos ya se ajustan a la Norma europea Eco Design 2020 puesto que están dotados de una clasificación energética A.
Auténtica joya tecnológica y gastronómica, el nuevo horno G4 se fabrica, tal y como corresponde a un producto de su clase, por unidades en Francia, en los talleres de Saint-Ouen-l’Aumône, por los compañeros de La Cornue.